La ley nacional 26.657 de Salud mental tiene más de una década y con una fuerte raíz en la defensa de los derechos humanos entre varias cuestiones plantea reformas en la atención en salud mental tendientes a la desmanicomialización. Esta cuestión requiere de acciones en cada jurisdicción para lograr ese proceso que implica la reintegración y la autonomía de las personas internadas. “Hace muchos años que se viene trabajando en la transición porque muchos de los usuarios a veces están internados hace muchísimos años. Entonces reinsertarse por ejemplo en sus familias es algo muy difícil. Ahí es donde aparece el proyecto de las casas de medio camino en donde se produce una suerte de comunidad en donde los usuarios empiezan a hacer una vida integrada y además supervisada por profesiones”, explicó Cecilia Vicedo Calderoni, presidenta del Colegio de Psicólogos de Lomas de Zamora.
"Lo que se busca es reconocer algunos ejes transversales que atraviesan todo este plan, porque la Ley Nacional de Salud Mental establece una definición sobre salud mental que supera una mirada sobre lo biológico y psíquico sino que incorpora otros vectores que estan relacionados con el acceso a derechos que a su vez para garantizarlos hace falta un trabajo intersectorial. Este plan lo que propone es generar ejes de trabajo en función de garantizar derechos con un abordaje de salud mental teniendo en cuenta estos ejes", contó Mariano Poblet Machado, oordinador del Centro de Salud Mental Comunitaria "Mauricio Goldenberg" de la Universidad Nacional de Lanús (UNLa)