18 de noviembre, 2020 17:33
00:00 / 21:51
8 reproducciones
Este martes el presidente de la Nación, Alberto Fernández, ha enviado al Congreso el tan esperado proyecto de Interrupción Voluntaria del Embarazo. El festejo fue unánime desde todas las agrupaciones y movimientos feministas porque se espera que en esta oportunidad definitivamente ambas cámaras voten a favor y se pueda garantizar el derecho de las personas gestantes a decidir sobre nuestros propios cuerpos y a salvar la vida de vida de cientas de personas que mueren en la clandestinidad. Desde la Campaña Nacional por el Derechos al Aborto Legal, Seguro y Gratuito, movimiento que ha sido sin lugar a dudas artífice de esta lucha y debates a lo largo y ancho del país, y autoras de los distintos proyectos de ley presentados hasta esta semana, aún no se han pronunciado públicamente sobre la iniciativa oficial. Sin embargo, distintas referentas han advertido algunas cuestiones que pueden profundizar el debate al interior de las cámaras. Entre estos puntos, el más alertante tiene que ver con la objeción de conciencia incorporada en el proyecto del ejecutivo. "Nuestro proyecto de ley obviamente que eso no lo contempla, porque en ninguna práctica médica un profesional de la salud recurre a la objeción de conciencia para una intervención. La objeción de conciencia es a nivel individual -una institución no puede declararse objetora de conciencia- y esas personas que se consideren objetoras y no quieran garantizar ese derecho están obligades a hacer la derivación", dijo Leticia Corral, integrante de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito, Regional Sur. Y aclaró: "Consideramos que eso genera muchos problemas porque sabemos que en muchos lugares del país, incluso acá en el conurbano, existen muchas instituciones que son objetoras de conciencia y que amparándose en eso niegan todo derecho a decidir que tiene una persona que quiera interrumpir un embarazo no deseado". Leer más
Este martes el presidente de la Nación, Alberto Fernández, ha enviado al Congreso el tan esperado proyecto de Interrupción Voluntaria del Embarazo. El festejo fue unánime desde todas las agrupaciones y movimientos feministas porque se espera que en esta oportunidad definitivamente ambas cámaras voten a favor y se pueda garantizar el derecho de las personas gestantes a decidir sobre nuestros propios cuerpos y a salvar la vida de vida de cientas de personas que mueren en la clandestinidad. Desde la Campaña Nacional por el Derechos al Aborto Legal, Seguro y Gratuito, movimiento que ha sido sin lugar a dudas artífice de esta lucha y debates a lo largo y ancho del país, y autoras de los distintos proyectos de ley presentados hasta esta semana, aún no se han pronunciado públicamente sobre la iniciativa oficial. Sin embargo, distintas referentas han advertido algunas cuestiones que pueden profundizar el debate al interior de las cámaras. Entre estos puntos, el más alertante tiene que ver con la objeción de conciencia incorporada en el proyecto del ejecutivo. "Nuestro proyecto de ley obviamente que eso no lo contempla, porque en ninguna práctica médica un profesional de la salud recurre a la objeción de conciencia para una intervención. La objeción de conciencia es a nivel individual -una institución no puede declararse objetora de conciencia- y esas personas que se consideren objetoras y no quieran garantizar ese derecho están obligades a hacer la derivación", dijo Leticia Corral, integrante de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito, Regional Sur. Y aclaró: "Consideramos que eso genera muchos problemas porque sabemos que en muchos lugares del país, incluso acá en el conurbano, existen muchas instituciones que son objetoras de conciencia y que amparándose en eso niegan todo derecho a decidir que tiene una persona que quiera interrumpir un embarazo no deseado".